El domingo 3 marzo, realizamos un día de convivencia en el Valle Perdido un grupo de socios/as, continuando con esta actividad las programadas para este curso, 2018/19. Aquí os contamos cómo nos fue:
Nos encontramos a media mañana en el área recreativa de Valle Perdido, zona que forma parte de El Valle y Carrascoy, que por su cercanía a Murcia constituye el principal pulmón verde de la capital y toda su área metropolitana.
Valle Perdido es una zona fantástica en la que pasar un buen día, como así lo habíamos constatado ya varias veces anteriormente. Merenderos y pistas deportivas, rodeados de naturaleza, principalmente bosque de pino carrasco.
Poblaciones aledañas al parque son, en su mayoría integradas dentro del área sub-comarcal denominada Cordillera Sur: Sangonera la Verde, El Palmar, La Alberca, Beniaján, Corvera y Sucina.
Día de juegos de mesa, charla distendida entre grandes y pequeñas/os, música, paseos… Lanzamiento de piedras (¡con precaución, eh!), observación de bichos… ¡Hasta telescopio había!
Almorzamos y comimos por allí, de campo, bocata y fiambrera, mientras nuestros chicos y chicas exploraban la zona, jugaban, inventaban… Con una larga sobremesa, puesto que nadie parecía tener prisa, seguramente por el ambiente, tan armonioso, que se respiraba.
Cafés, dulces… ¡Vamos, que algunos y algunas hasta merendamos!
Total: otro día chulo, en buena compañía.
Siempre nos pasa parecido. Así que ya no nos sorprende tanto. Aunque al principio…, al principio ¡vaya si nos sorprendía!
Así que, como ya nos hemos convencido de lo nutritivo, necesario y diríamos hasta imprescindible de este tipo de encuentros, tanto para nosotros/as como para nuestros hijos e hijas, pronto, otro encuentro, otra aventura, otro buen rato, que tanta falta les hace y nos hace.
PD: Porque no solo de pan se vive.