En un post anterior se relacionaban la cantidad de premios Nobel científicos de un país con su PIB por habitante. La intención era trasladar la idea que aquellos países que más valoran la inteligencia consiguen mayor PIB, ya que existe una relación demostrada entre ambos. En dicha comparación no se tuvieron en cuenta los premios Nobel de Literatura, aunque no hubieran alterado el resultado y por lo tanto las conclusiones. Se ha decido aquí volver sobre ello (en honor a ellos) y estudiar a todos nuestros premios Nobel realizando una reflexión desde las altas capacidades intelectuales.
Reflexiones desde las altas capacidades intelectuales
Una conclusión rápida sería que si nuestro padre es médico tenemos más posibilidad de obtener el Nobel. Aunque más acertado es decir, que hace unos años solo estudiaban aquellos que pertenecían a una familia acomodada, en caso contrario el estudio era un lujo inalcanzable.
Hoy en día, muchos se felicitan dado que tenemos una enseñanza pública, gratuita y obligatoria para todos. Sin embargo, hay un engaño enmascarado, las familias con bajos recursos creen que tienen la panacea, pero basta fijarse a qué colegios llevan las familias adineradas a sus hijos. Efectivamente, actualmente existe una educación diferenciada según el poder adquisitivo de los padres.
La solución, sería exigir más calidad en la enseñanza pública obligatoria, programas específicos dónde se libere el talento de los alumnos y no se reprima.
Está demostrado que los niños con altas capacidades nacen en las mismas proporciones en las familias humildes que en las acomodadas, pero solo en estas ultimas desarrollan sus talentos. Cuando un sistema educativo público no atiende adecuadamente a los alumnos con talento, está desfavoreciendo a los niños procedentes de familias con bajos recursos. Las familias con alto poder adquisitivo siempre dispondrán de alternativas eficaces de forma privada para atender adecuadamente el talento de sus hijos.
Ya hemos explicado que los alumnos con altas capacidades los podemos clasificar en tres grupos, más o menos a partes iguales. Alumnos que destacan en todas las áreas y terminan realizando estudios superiores con buenas calificaciones, alumnos que superan la etapa obligatoria pero no obtienen una titulación superior y alumnos que fracasan por no conseguir ni siquiera la titulación obligatoria. Hay que decir, que los dos últimos grupos es consecuencia de una falta de atención educativa adecuada para estos alumnos con altas capacidades intelectuales.
Evidentemente José Echegaray, pertenece a este primer grupo, ya que consiguió el éxito en todas las facetas y de forma brillante. Jacinto Benavente y Camilo José de Cela, podríamos clasificarlos en el segundo grupo, ambos empezaron estudios superiores que no terminaron; Camilo José Cela lo intentó dos veces, en 1934 ingresa en la Facultad de Medicina para después abandonar y en 1940 comienza a estudiar Derecho que finalmente tampoco termina. Evidentemente no hay ninguno perteneciente al tercer grupo, hoy en día orientados hacía el PCPI como mejor opción. Nuestro sistema educativo actual reprime el talento en los alumnos más capaces.
Hemos repetido en varios ocasiones que altas capacidades y rendimiento académico no es lo mismo, Santiago Ramón y Cajal según su biografía «su inteligencia y constancia no se reflejaron en su vida como estudiante». El aburrimiento es otra característica de los alumnos con altas capacidades, según la biografía de Juan Ramón, sacaba buenas notas pero se aburría mucho en las clases y dibujaba en los libros y en los cuadernos.
En la mayoría aparece un factor común: una o varias personas que influyen positivamente en sus vidas.
Premios Nobel españoles
José Echegaray y Eizaguirre (1832-1916)
Premio Nobel de Literatura en 1904. Su padre, médico y profesor de instituto. Pasó su infancia en Murcia, donde realizó los estudios correspondientes a la enseñanza primaria. Fue en el Instituto de Murcia, donde comenzó su afición por las matemáticas, gracias a su profesor Don Francisco Alix. En su juventud leía a Goethe, Homero y Balzac, lecturas que alternaba con las de matemáticos como Gauss, Legendre y Lagrange.
El currículo de José Echegaray es sin duda de los más brillantes de la España moderna: ingeniero de Caminos (Se graduó con el número uno de su promoción), profesor de Cálculo y Mecánica, catedrático de Física Matemática, economista, ministro de Hacienda y de Fomento, presidente del Ateneo, creador del Banco de España, presidente de la Real Academia de las Ciencias, Premio Nobel de Literatura, periodista, divulgador científico, senador vitalicio… Hizo de todo este hombre del Renacimiento y siempre cosechó un éxito notable y, sin embargo, su figura está entre las grandes desconocidas de nuestra historia(*).
Santiago Ramón y Cajal (1852-1934)
Premio Nobel de Medicina en 1906. Vivió su infancia entre continuos cambios de residencias, acompañado por su padre que era médico cirujano. De carácter muy travieso y con una gran determinación, Santiago mostró, desde pequeño, aptitud para las artes plásticas, especialmente para el dibujo. Su inteligencia y constancia no se reflejaron, sin embargo, en su vida como estudiante, ya que detestaba el memorizar de carrerilla.
Jacinto Benavente y Martínez (1866-1954)
Premio Nobel de Literatura 1922. Era hijo menor de los tres que tuvo el notable médico pediatra Mariano Benavente. Cursó estudios de leyes en la Universidad de Madrid, pero abandona para dedicarse a escribir. Viajó por Francia, Alemania y Rusia, donde fue empresario de circo e incluso tomó parte, ocasionalmente, en la pista. Fue un dramaturgo, director, guionista y productor de cine español.
Juan Ramón Jiménez Mantecón (1881–1958)
Premio Nobel de Literatura en 1956. Su familia se dedicaba con éxito al comercio del vino. Como ya había hecho su hermano Eustaquio, Juan Ramón se matriculó en el colegio de jesuitas de San Luis Gonzaga del Puerto de Santa María para estudiar el Bachillerato en Artes. Durante los cuatro años que permanece en este pueblo, su vida transcurre entre las paredes del colegio. Allí se forma en los valores jesuitas de austeridad y estudio. En el Puerto fue compañero de clase del poeta Fernando Villalón con quien compartió numerosas bromas y fechorías. Juan Ramón sacaba buenas notas pero se aburría mucho en las clases y dibujaba en los libros y en los cuadernos.
Severo Ochoa de Albornoz (1905–1993)
Premio Nobel de Fisiología y Medicina en 1959. Su padre fue abogado. En septiembre de 1936 viajó a Alemania, luego al Reino Unido y finalmente, en 1940 pasó a afincarse en los Estados Unidos. En 1941 consigue trabajo en la Universidad Washington de San Luis y en 1945 en la Universidad de Nueva York. El matrimonio Ochoa se nacionalizó estadounidense en 1956, conservando la doble nacionalidad española y estadounidense durante toda su vida. En 1974 se trasladó como Investigador Distinguido al Instituto Roche de Biología Molecular en Nueva Jersey. Se jubiló en la Universidad de Nueva York en 1975.
Vicente Aleixandre (1898–1984)
Premio Nobel de Literatura en 1977. Hijo de una familia de la burguesía española, su padre fue ingeniero de ferrocarriles. Pasa su infancia en Málaga, donde comparte estudios con el futuro escritor Emilio Prados. Después se traslada a Madrid donde cursa estudios de Derecho y Comercio. En 1919 se licencia en Derecho y obtiene el título de intendente mercantil.
En 1917 conoce a Dámaso Alonso en Las Navas del Marqués, lugar donde veraneaba, y este contacto le ayudará a despertar su vocación poética.
Publica sus primeros poemas en en 1926. Establece contacto con Cernuda, Altolaguirre, Alberti y García Lorca.
Camilo José de Cela y Trulock (1916–2002)
Premio Nobel de Literatura en 1989. Padre español y madre inglesa. El abuelo había sido gerente de la primera línea ferroviaria gallega. En 1925 la familia se instaló en Madrid y Camilo cursó estudios en el colegio de los Escolapios de la calle General Porlier. En 1934 ingresa en la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid. Sin embargo, pronto la abandona para asistir como oyente a la Facultad de Filosofía y Letras, donde el poeta Pedro Salinas da clase de literatura contemporánea. Cela le muestra sus primeros poemas, y recibe de él estímulo y consejos. Este encuentro resultará fundamental para el joven Cela, ya que, según él mismo creía, fue lo que decidió definitivamente su vocación literaria.
Jorge Mario Pedro Vargas Llosa (Arequipa, 28 de marzo de 1936)
Es un escritor peruano, que desde 1993 cuenta también con la nacionalidad española. En 2010 recibe el premio Nobel de Literatura.
Referencias:
José Echegaray: wikipedia, www.buscabiografias.com
Santiago Ramón y Cajal: wikipedia
Jacinto Benavente: wikipedia, www.buscabiografias.com
Juan Ramón Jiménez: wikipedia, www.juanramonjimenez.com, www.cervantes.es, cvc.cervantes.es
Severo Ochoa: wikipedia
Vicente Aleixandre: wikipedia, www.vicentealeixandre.es, cvc.cervantes.es
Camilo José de Cela: wikipedia, cvc.cervantes.es
Mario Vargas Llosa: wikipedia
* Su figura está entre las grandes desconocidas de nuestra historia porque en España no se valora el talento.